Casa Nostra, Casa Vostra

Març 2017

El 18 de febrero asistí, como centenares de ciudadanos y ciudadanas de El Prat, a la manifestación organizada por la Plataforma Casa Nostra, Casa Vostra que, bajo el lema Volem acollir, reclamaba un profundo cambio en las políticas europeas de acogida a los refugiados. Más allá de la utilización o no de determinados símbolos en una marcha por los refugiados (la presencia de lemas independentistas y esteladas me hacía pensar que no a todos nos congregaba la misma causa), es indiscutible que la postura de la Unión Europea en la catástrofe humanitaria de los refugiados es vergonzosa. Debemos respetar los derechos humanos de las personas que, huyendo
de la guerra, pretenden rehacer sus vidas en sociedades pacífi cas. Las políticas europeas de acogida y los tratados internacionales deben dejar de ser incumplidos, y han de ser solidarios con quienes se han visto obligados a abandonar sus países. Acoger refugiados entraña problemas, e incluso riesgos, eso es innegable, pero las sociedades democráticas y maduras tienen la oportunidad de dar acogida a quienes viven el drama del exilio. Por compromiso ético y cívico. Algunos de los lemas de la marcha exhortaban a los dirigentes políticos a estar a la altura de los acontecimientos. Porque Europa se construyó sobre principios humanitarios y solidarios, y no pueden asistir de brazos cruzados a la muerte de personas en el Mediterráneo.

Juan Pedro Pérez Castro
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